
Ante un pedido de la Fiscalía de Estado, la Corte Suprema de Catamarca pospuso por tiempo indefinido, la consulta popular no obligatoria ni vinculante que se iba a realizar hoy y la declaró "inconstitucional", porque fue promovida por el municipio cuando en realidad corresponde al gobierno catamarqueño.
Según Diario C, el titular de la fiscalía de Estado de la provincia, Simón Hernández, se basó en "que los resultados de dicha convocatoria, no le darían [a la municipalidad de Tinogasta] la facultad de accionar al respecto". Y agregó que "en todo caso, si hay una consulta, debería ser a nivel provincial".
Para ser más gráfico, Página 12 mencionó que el presidente de la Corte, Ernesto César Oviedo, "avisó que, de realizarse igual [el plebiscito], los votantes incurrirían en un delito penal por desoír una orden judicial".
¿Qué está en juego?
Página 12 explicó en pocas líneas.
El intendente de Tinogasta, Hugo Avila, había llamado a plebiscito por las denuncias ambientales de los vecinos, autoconvocados contra la explotación del uranio. Una empresa australiana ya realizó exploraciones en la zona y la posibilidad de que comience su actividad provocó la reacción vecinal.
Greenpeace expresó en un comunicado que "las explotaciones mineras y de concentración del uranio generan gran cantidad de residuos químicos y de restos minerales". Entre ellos mencionó materiales radiactivos y metales pesados que "pueden filtrarse dentro de las napas y cursos de agua" o esparcirse por el aire y provocar cáncer.
Cabe aclarar que "la comunidad no está en contra de la minería, sino 'en contra de su uso irresponsable'", afirmó Pablo Herrera de Greenpeace a Página 12. Si las condiciones de explotación no cambian, el daño no sería sólo ecológico sino también arqueológico ya que destruiría ruinas del Camino del Inca que perduran en la región.
Pero eso no es todo. Página 12 profundizó:
Al tema ambiental y el jurídico, se suma el político: Avila, opositor al gobierno provincial, perdió la Intendencia por seis votos ante el candidato oficialista.[...] Por la estrecha diferencia, Avila pidió un recuento que le fue negado por la Justicia electoral.
Y en medio, quedó entre tironeos la legitimidad de los mecanismos de democracia participativa. "Una vez más -denunció Javier Rodríguez Pardo, periodista especializado- aparece la mordaza a la que se somete a nuestros pueblos, tal como ocurrió en tres ocasiones con el pueblo sanjuanino de Calingasta", tres veces privado de concretar un plebiscito por el "sí o no" a la gran minería.
¿Se quiere callar al pueblo?
En 2003, en Esquel, aunque el plebiscito tampoco generaba obligación alguna a los funcionarios, el resultado de 80% de votos CONTRA la gran minería tuvo un impacto en la opinión pública tan grande que la minera Meridian Gold no pudo continuar con sus planes.
Ahora en Tinogasta, ¿evadir el plebiscito sería una forma de evitar otro rechazo explícito como el de Esquel? Así lo entendieron tinogasteños que, si bien rechazaron la medida judicial, lo celebraron como una victoria. "La prohibición de la Consulta en Tinogasta, no hace más que confirmar –para propios y extraños- la inequívoca y casi unánime voluntad de su pueblo de rechazar los mega-emprendimientos mineros", expresó públicamente Horacio Machado Aráoz, titular de la ONG Bienaventurados los Pobres.
Con marchas de 7.000 personas en las calles semanas atrás, "el pueblo de Tinogasta nos ha brindado, a catamarqueños y argentinos, más que un testimonio de su conciencia ambiental, una lección histórica de Libertad y Dignidad", culminó Machado Aráoz.
Foto: Ruta0
Comentarios
La única solución posible a este dificultad y a los demás problemas ambientales es: actuar por uno mismo y reclamar a los gobernantes.
¿Dónde está Romina Picolotti? ¿Dijo algo respecto de esto? ¿Tomó acción para destrabar el conflicto?
Los felicito por su valiente trabajo, sigan así. Saludos.