El pasado lunes, el doctor japonés Masaru Emoto brindó una disertación frente a una audiencia expectante que quería conocer a la persona que desde hace 10 años desarrolla una serie de investigaciones sobre "los mensajes ocultos del agua".
Poco se sabe del agua a este nivel de profundidad en que Emoto combina ciencia y fe. Y considerando que el ser humano y la vida en la Tierra están compuestos en su mayoría por agua, entonces su trabajo sobre este líquido vital permite comprender un poco más de la humanidad.
Foto: El poder de la vida
El Dr. Emoto plantea que el agua guarda información de la cual se puede desprender si hay armonía o discordia en los distintos aspectos de la vida. Tal es así que las características del agua podrían indicar y aliviar desórdenes a nivel individual (enfermedades) o social (conflictos o desentendimientos) y también problemas ambientales, globales o del universo.
Para demostrar su hipótesis, descubrió que congelando el agua durante 3 horas a -25ºC, se podía observar dicha información en los cristales de hielo. Al principio puede sonar descabellado, aunque sus demostraciones en
Youtube no dejan de asombrar.
Dentro de un laboratorio a 5 grados bajo cero, con un microscopio y diversas cámaras fotográficas especialmente adaptadas, el equipo de Emoto logró retratar la personalidad de cada muestra de agua que extrajo de diferentes ambientes naturales en el planeta.
Por otro lado, expuso muestras de agua a diferentes estímulos tanto visuales, sonoros como verbales y a través de sus cristales -en comparación con muestras testigo- logró observar cómo el agua transmite lo que lo rodea. De todo eso, lo más llamativo es que los cristales más armónicos resultaron ser aquellos que en su estado líquido se expusieron a música tranquila y a expresiones de buenos sentimientos.
Comentarios
Aprender a cuidarla no sólo ayudará a la conservación de los distintos biomas y paisajes, sino al ambiente en su totalidad. Con esto estoy incluyendo también al hombre con todos sus parámetros.
Ojalá la humanidad tome conciencia de que este recurso es imprescindible, que sin él no vivimos, y todo esto es -simplemente- porque el AGUA es el 70% de cada uno.
Saludos...
Anahí M. Llanes.