Este mediodía durante un acto en Río Gallegos, la Presidente Cristina Fernández anunció la licitaciones de las represas "Néstor Kirchner" y "Jorge Cepernic" que el gobierno planificó construir sobre el río Santa Cruz. "Nos endeudamos para tener 1740 megavatios de energía renovable y limpia", aseguró la mandataria, continuando con el discurso oficial "energía para seguir creciendo". Sin embargo, los grandes embalses no están considerados fuentes de energía limpia, por múltiples impactos ambientales que genera. Más aún, no existen suficientes estudios en este caso puntual.
Las represas de la polémica. En un principio, tenía otro nombre. El Complejo Hidroeléctrico La Barrancosa-Cóndor Cliff proyectado para el aprovechamiento hidroeléctrico del río Santa Cruz estaba planteado desde hace varios años atrás. La ex-Barrancosa ("Gobernador Jorge Cepernic") se ubica a 185 km de la desembocadura en el Océano Atlántico tendría una capacidad máxima de 600 MW. Por su parte, la ex-Cóndor Cliff (hoy "Presidente Néstor Kirchner") a 250 kilómetros de la desembocarura, generaría 1140 MW. Entre ambas, el complejo sería la tercera hidroeléctrica en importancia, después de la de Salto Grande y Yacyretá, el embalse binacional con gran impacto territorial.
Según explicó hoy la Presidente, la historia de la adjudicación de la obra se remonta al 2008, con una iniciativa privada, pero hasta 2010 no obtuvo financiamiento. Tras esta experiencia, hubo un llamado a licitación en 2010, que es el punto en el cual hubo denuncias sobre casos de lobby para no adjudicar la obra al grupo IMPSA, Corporación América y Camargo Correa, lo cual negó el Ministro de Planificación, Hubo de Vido. Al mismo tiempo, también tomaron relevancias las indicaciones de que el empresario Lázaro Báez compró terrenos que ahora recibirían importantes indemnizaciones, por ser parte de las 47 mil hectáreas que ocupará el complejo del embalse.
Finalmente, la tercera fue la vencida, ya que este año dos bancos invirtieron ya que, siguiendo la versión presidencial: "para llevarla a cabo es necesario endeudamiento". El Boletín Oficial anunció como ganador al consorcio integrado por Electroingeniería SA, Hidrocuyo SA y el capital de China Gezhouba Group Company Limited, que aportó un monto de 22.925.870.000 pesos. Asimismo, se dio a conocer que la adjudicación fue ratificada por la resolución 760/13, que desestima la oferta del consorcio integrado por la Constructora Norberto Odebrecht, Industrias Metalúrgicas Pescarmona y Alstom Brasil. El plazo de ejecución es de 66 meses.
Energía y Economía. "Si no fuera por la importación que debemos hacer del petróleo, tendríamos 52 mil millones de reservas", expresó Cristina Fernández, en un pasaje donde volvía a remarcar los logros del modelo económico del gobierno. De este modo, la mandataria explicó la estatización parcial de YPF, aunque como ya hemos discutido, la política energética que se tomó con la promoción de los hidrocarburos no convencionales, significa la llegada del extractivismo al área energética. Puntualmente, el emblemático acuerdo con Chevron también pone en duda el objetivo de soberanía energética. El debate sobre este punto debe ser más profundo, hasta llegar al concepto de Crecimiento.
En la misma línea,el militante ambientalista Enrique Viale expresó en una reciente entrevista sobre Chevron: "Lo primero que hay que pensar es ´energía para qué y para quién´. En nuestro país entre tres mineras consumen la energía de Atucha I, una sola empresa como Aluar consume tanto gas como el que importamos de Bolivia, la Alumbrera consume la misma energía que toda la provincia de Catamarca. Eso es algo que hay que pensar. Otra cosa es poder salir de esas verdades hegemónicas, por ejemplo, poder descentralizar la fuente de energía, pero le estás sacando ese monopolio a alguien que se está llenando de dinero". La discusión del modelo energético es central, entonces.
¿Y el ambiente? En un reporte técnico del 2005, una investigación del CENPAT (centro regional del CONICET) dirigida por Miguel Pascual indicaba sobre su área de estudio, la fauna ictícola: "La construcción de represas produce cambios físicos profundos en las cuencas, los que a su vez se traducen en efectos biológicos sobre los peces. Los principales impactos son: a. Transformación de secciones de río en ambientes lacustres artificiales b. Alteraciones en los regímenes hídricos y calidad del agua en las secciones de río debajo de la represa c. Bloqueo del pasaje de peces desde aguas arriba a aguas abajo y viceversa, y la consecuente fragmentación de un ambiente otrora continuo".
En este caso puntual del complejo hidroeléctrico de Santa Cruz, el último gran "río libre" que resta en Argentina, los perjuicios ecológicos están invisibilizados. En 2008, ComAmbiental informaba que los propios investigadores del CENPAT se vieron sorprendidos por los anuncios sobre la represa, sin que existieran evaluaciones de impacto ambiental de manera integral. Es más, resoluciones oficiales citaban su trabajo, que sólo era un informe preliminar, en el que se solicitaban más estudios. A partir de estos datos, el documentalista Gerardo Bartolomé inició una cruzada para crear un Parque Nacional allí. Entre idas y vueltas de licitaciones, con esta noticia debe comenzar el debate serio sobre el Río Santa Cruz.
Ver también:
ComAmbiental: "Energía para seguir creciendo, crecimiento para combatir la pobreza?" (columna de análisis)
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Vista aérea del Río Santa Cruz. Por Alberto Hemlich en web temática. |
Las represas de la polémica. En un principio, tenía otro nombre. El Complejo Hidroeléctrico La Barrancosa-Cóndor Cliff proyectado para el aprovechamiento hidroeléctrico del río Santa Cruz estaba planteado desde hace varios años atrás. La ex-Barrancosa ("Gobernador Jorge Cepernic") se ubica a 185 km de la desembocadura en el Océano Atlántico tendría una capacidad máxima de 600 MW. Por su parte, la ex-Cóndor Cliff (hoy "Presidente Néstor Kirchner") a 250 kilómetros de la desembocarura, generaría 1140 MW. Entre ambas, el complejo sería la tercera hidroeléctrica en importancia, después de la de Salto Grande y Yacyretá, el embalse binacional con gran impacto territorial.
Según explicó hoy la Presidente, la historia de la adjudicación de la obra se remonta al 2008, con una iniciativa privada, pero hasta 2010 no obtuvo financiamiento. Tras esta experiencia, hubo un llamado a licitación en 2010, que es el punto en el cual hubo denuncias sobre casos de lobby para no adjudicar la obra al grupo IMPSA, Corporación América y Camargo Correa, lo cual negó el Ministro de Planificación, Hubo de Vido. Al mismo tiempo, también tomaron relevancias las indicaciones de que el empresario Lázaro Báez compró terrenos que ahora recibirían importantes indemnizaciones, por ser parte de las 47 mil hectáreas que ocupará el complejo del embalse.
Energía y Economía. "Si no fuera por la importación que debemos hacer del petróleo, tendríamos 52 mil millones de reservas", expresó Cristina Fernández, en un pasaje donde volvía a remarcar los logros del modelo económico del gobierno. De este modo, la mandataria explicó la estatización parcial de YPF, aunque como ya hemos discutido, la política energética que se tomó con la promoción de los hidrocarburos no convencionales, significa la llegada del extractivismo al área energética. Puntualmente, el emblemático acuerdo con Chevron también pone en duda el objetivo de soberanía energética. El debate sobre este punto debe ser más profundo, hasta llegar al concepto de Crecimiento.
En la misma línea,el militante ambientalista Enrique Viale expresó en una reciente entrevista sobre Chevron: "Lo primero que hay que pensar es ´energía para qué y para quién´. En nuestro país entre tres mineras consumen la energía de Atucha I, una sola empresa como Aluar consume tanto gas como el que importamos de Bolivia, la Alumbrera consume la misma energía que toda la provincia de Catamarca. Eso es algo que hay que pensar. Otra cosa es poder salir de esas verdades hegemónicas, por ejemplo, poder descentralizar la fuente de energía, pero le estás sacando ese monopolio a alguien que se está llenando de dinero". La discusión del modelo energético es central, entonces.
¿Y el ambiente? En un reporte técnico del 2005, una investigación del CENPAT (centro regional del CONICET) dirigida por Miguel Pascual indicaba sobre su área de estudio, la fauna ictícola: "La construcción de represas produce cambios físicos profundos en las cuencas, los que a su vez se traducen en efectos biológicos sobre los peces. Los principales impactos son: a. Transformación de secciones de río en ambientes lacustres artificiales b. Alteraciones en los regímenes hídricos y calidad del agua en las secciones de río debajo de la represa c. Bloqueo del pasaje de peces desde aguas arriba a aguas abajo y viceversa, y la consecuente fragmentación de un ambiente otrora continuo".
En este caso puntual del complejo hidroeléctrico de Santa Cruz, el último gran "río libre" que resta en Argentina, los perjuicios ecológicos están invisibilizados. En 2008, ComAmbiental informaba que los propios investigadores del CENPAT se vieron sorprendidos por los anuncios sobre la represa, sin que existieran evaluaciones de impacto ambiental de manera integral. Es más, resoluciones oficiales citaban su trabajo, que sólo era un informe preliminar, en el que se solicitaban más estudios. A partir de estos datos, el documentalista Gerardo Bartolomé inició una cruzada para crear un Parque Nacional allí. Entre idas y vueltas de licitaciones, con esta noticia debe comenzar el debate serio sobre el Río Santa Cruz.
Ver también:
ComAmbiental: "Energía para seguir creciendo, crecimiento para combatir la pobreza?" (columna de análisis)
ComAmbiental: "Represas al margen de la Ciencia". (Archivo 2008).
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