Se suman las críticas a Picolotti

A poco tiempo de llegar a su primer año de gestión, la Secretaria de Ambiente nacional Romina Picolotti recibe críticas de sectores externos e internos de su repartición. Denuncian, por ejemplo, que la cartera cedió a los intereses del área minera, dejó a un lado el conflicto por las pasteras y está desarticulando equipos de trabajo propios sin motivos aparentes.

Las comunidades perjudicadas por algún tipo de contaminación y las organizaciones dedicadas a velar por los derechos ambientales están agotando su paciencia. Temen que en el año electoral, la gestión ambiental pierda una gran oportunidad de cambio y sea usada en su contra.


La RENACE contra el acercamiento de Picolotti a Minería

La semana pasada, la Red Nacional de Acción Ecologista exigió la renuncia de Romina Picolotti en vistas del acuerdo de la secretaría de Ambiente con la de Minería, luego de conflictos solapados dentro del gobierno kirchnerista.

Javier Rodríguez Pardo, de MACHSEPA y la Unión de Asambleas Ciudadanas, explicó que la medida "pretende legalizar la entrega de los bienes comunes con el beneplácito de la autoridad ambiental de la Nación, que a su vez intenta representar y decidir por todas las comunidades castigadas por la explotación minera". De hecho, prosiguió: "la autoridad de aplicación que fija estas normativas [ambientales sobre minería] es la misma que venía funcionando, la que evalúa el Informe de Impacto Ambiental (IIA) y lo aprueba mediante una Declaración de Impacto Ambiental (DII), que en definitiva es firmado por el gobernador de turno, sujeto absolutista que niega audiencias ambientales para la minería y prohíbe las consultas populares".

Bajo esta línea, la mina de oro "Cerro Vanguardia" en Santa Cruz recibió también luz "verde" de la secretaría a pesar de no haber dado respuestas satisfactorias para las comunidades cercanas que se perjudicarían por el uso de cianuro y explosivos, y los pasivos ambientales que persisten una vez finalizada la explotación.

Promesas traspapeladas

La Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú solicitó mediante una carta al Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, la realización de “un estudio epidemiológico de los pobladores de la región comprendida en un radio de 100 km de la fábrica de pasta de celulosa Botnia, dentro del territorio argentino, y el posterior seguimiento en el tiempo”. Sólo así se podría comprobar los efectos del funcionamiento de Botnia. Sin embargo, a meses de la inauguración de la planta, la Secretaría de Ambiente no anunció ninguna iniciativa de control sanitario.

Teniendo en cuenta que la Secretaría dejó de depender de la cartera de Salud, que tuvo cortocircuitos con Cancillería y que el diálogo con los gualeguaychuenses se interrumpió hace meses, la Asamblea admitió sentirse abandonada por las autoridades y "lamentó que deba defender la "soberanía" del país en lugar de quienes "nos representan", según publicó el Diario La Nueva Provincia de Bahía Blanca.

Cuando el ambiente es bandera de campaña

Los roces no terminan allí. En tiempo de elecciones los proyectos, las denuncias y los créditos de cualquier logro ambiental son objeto de peleas públicas. Y aquí también Picolotti ganó enemigos. En un acto proselitista junto al candidato Daniel Filmus, ella declaró que "falta decisión política en la gestión porteña para implementar los programas de reducción de contaminación". El ministro de Ambiente de la Ciudad de Buenos Aires, Marcelo Vensentini, no tardó en reaccionar.

Por otro lado, dentro de la Secretaría de Ambiente de la Nación el staff está cambiando. Sin explicaciones desde el área de Prensa de la Secretaría, Bruno Carpinetti (ex-presidente de Parques Nacionales) dejó de ser el Subsecretario y su puesto está vacante desde el martes pasado. Una fuente cercana afirmó que "lo sacaron con la policía" y aseguró que lo seguirán más funcionarios.

El sucesivo nombramiento de profesionales ajenos al "ambiente" -como Patricia Plez, artista y publicista, designada Directora Nacional de Gestión del Desarrollo Sustentable- indignó a varios funcionarios con formación y carrera en las problemáticas ambientales de la Argentina.

Estas inestabilidades podrían entenderse como parte del proceso de adaptación de la nueva gestión, sobre todo para activar el papel figurado que cumplía el anterior secretario de Ambiente, Atilio Savino. No obstante, despiertan gran desconfianza en diferentes localidades cansadas de oir discursos sin hechos concretos.

En este sentido, asambleas barriales, ONGs, abogados y otros actores sociales de todo el país se reunirán el fin de semana largo del 31 de marzo al 2 de abril en un Plenario Ambiental Interprovincial en la Ciudad de las Termas de Río Hondo, provincia de Santiago del Estero. El objetivo será intercambiar experiencias y coordinar acciones conjuntas. Tienen en claro que no pueden esperar más y saben que unidos y organizados la justicia ambiental puede llegar.