Diferentes actividades se desarrollan en torno al 22 de Marzo, Día Mundial del Agua. Este año, la ONU le dedica especial énfasis a la calidad, impulsando a que los gobiernos asuman medidas para prevenir y remediar la contaminación de los cursos hídricos.
En la Argentina, proteger la calidad del agua implica tratar varias deudas ambientales pendientes. Solo por mencionar algunas: sanear cuencas como el Matanza-Riachuelo, promover la pesca sustentable, salvaguardar los glaciares y los humedales e impulsar el tratamiento de los efluentes industriales y cloacales, entre otras.
Tomemos litros de conciencia. Ayer, los vecinos del Arroyo Sarandí en la localidad bonaerense de Avellaneda celebraron el primer ArroyoFest. Familias enteras salieron a las calles para expresar con ingenio que no tienen porqué aguantar los malos olores y las enfermedades cutáneas, gástricas o respiratorias. El foco del problema está identificado. Veintiuna empresas locales vierten sus efluentes directamente en el arroyo. Pero los principales responsables son otros, a los que designaron Miss Contaminación: los políticos que hacen la vista gorda.
De todas formas, la crítica no solo apunta a los funcionarios que miran para otro lado sino también a los ciudadanos que se resignan, por ejemplo, a que el Riachuelo agonice contaminado. En este sentido, Espacio OIKOS y Fundación Ecosur adhieren al segundo abrazo solidario al Matanza-Riachuelo para exigir:
- Un plan urbano ambiental para la cuenca
- Construcción de las plantas de tratamiento de líquidos cloacales
- Extensión de las redes de agua potable y cloacas
- Basta de vuelcos de líquidos industriales al río
- No a los basurales y al CEAMSE
- Preservación de los predios de Laguna de Rocha (Esteban Echeverría), Santa Catalina (Lomas de Zamora), Pastizales de Aldo Bonzi (La Matanza) y de todos los espacios verdes ribereños.
Por su parte, Amigos de la Tierra Argentina invita a festejar la Semana del Agua al aire libre, desde el Tigre hasta la Boca, con el lema “¿Qué corriente seguís?”. El cronograma incluye feria ambiental, jornadas de difusión sobre la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo, un taller de capacitación docente, cine libre y hasta la presentación de un libro.
A la pesca. El agua no es solo alimento sino también un medio, y de su calidad dependen flora y fauna de gran riqueza biológica, como por ejemplo sucede con los humedales, considerados esponjas purificadoras. Al respecto, la Fundación Reserva Natural Puerto Mar del Plata alerta que hay planes de construir un puerto deportivo y una playa de estacionamiento que afectarían seriamente la reserva homónima y la de Mar Chiquita en la Ciudad Feliz.
Otro tema candente es la actividad pesquera, tanto de mar como de río, que sufre desde hace años una merma de las especies comerciales. Organizaciones ambientalistas abogan por fomentar una pesca sustentable a través de mecanismos de control eficientes, dispositivos de pesca selectiva, recuperación de la pesca artesanal y orientación hacia el mercado interno en lugar de la exportación industrial.
Hablar de agua, a su vez, es discutir sobre la megaminería con cianuro, la pastera Botnia y las papeleras instaladas en territorio argentino. Es también represas hidroeléctricas, sequía e inundación y la necesidad de realizar obras pero fundamentalmente de conservar los bosques nativos que son los reguladores naturales del ciclo hídrológico.
“Somos agua desde siempre", recuerda el hidrogeólogo Ramón Vargas y por lo tanto "la crisis del agua es la crisis de la vida", sentencia. Desde esa relación indivisible entre los habitantes y el agua que constituye su territorio Vargas observa que más allá de las obras ingenieriles que se propongan, "sin cambio cultural no puede darse un cambio en la gestión del agua" y apela a fortalecer "la cultura democrática del agua".
Foto: Día Mundial del Agua-ONU. Autor: Guimel Zalgado/ZGD
En la Argentina, proteger la calidad del agua implica tratar varias deudas ambientales pendientes. Solo por mencionar algunas: sanear cuencas como el Matanza-Riachuelo, promover la pesca sustentable, salvaguardar los glaciares y los humedales e impulsar el tratamiento de los efluentes industriales y cloacales, entre otras.
Tomemos litros de conciencia. Ayer, los vecinos del Arroyo Sarandí en la localidad bonaerense de Avellaneda celebraron el primer ArroyoFest. Familias enteras salieron a las calles para expresar con ingenio que no tienen porqué aguantar los malos olores y las enfermedades cutáneas, gástricas o respiratorias. El foco del problema está identificado. Veintiuna empresas locales vierten sus efluentes directamente en el arroyo. Pero los principales responsables son otros, a los que designaron Miss Contaminación: los políticos que hacen la vista gorda.
De todas formas, la crítica no solo apunta a los funcionarios que miran para otro lado sino también a los ciudadanos que se resignan, por ejemplo, a que el Riachuelo agonice contaminado. En este sentido, Espacio OIKOS y Fundación Ecosur adhieren al segundo abrazo solidario al Matanza-Riachuelo para exigir:
- Un plan urbano ambiental para la cuenca
- Construcción de las plantas de tratamiento de líquidos cloacales
- Extensión de las redes de agua potable y cloacas
- Basta de vuelcos de líquidos industriales al río
- No a los basurales y al CEAMSE
- Preservación de los predios de Laguna de Rocha (Esteban Echeverría), Santa Catalina (Lomas de Zamora), Pastizales de Aldo Bonzi (La Matanza) y de todos los espacios verdes ribereños.
Por su parte, Amigos de la Tierra Argentina invita a festejar la Semana del Agua al aire libre, desde el Tigre hasta la Boca, con el lema “¿Qué corriente seguís?”. El cronograma incluye feria ambiental, jornadas de difusión sobre la Autoridad de Cuenca Matanza Riachuelo, un taller de capacitación docente, cine libre y hasta la presentación de un libro.
A la pesca. El agua no es solo alimento sino también un medio, y de su calidad dependen flora y fauna de gran riqueza biológica, como por ejemplo sucede con los humedales, considerados esponjas purificadoras. Al respecto, la Fundación Reserva Natural Puerto Mar del Plata alerta que hay planes de construir un puerto deportivo y una playa de estacionamiento que afectarían seriamente la reserva homónima y la de Mar Chiquita en la Ciudad Feliz.
Otro tema candente es la actividad pesquera, tanto de mar como de río, que sufre desde hace años una merma de las especies comerciales. Organizaciones ambientalistas abogan por fomentar una pesca sustentable a través de mecanismos de control eficientes, dispositivos de pesca selectiva, recuperación de la pesca artesanal y orientación hacia el mercado interno en lugar de la exportación industrial.
Hablar de agua, a su vez, es discutir sobre la megaminería con cianuro, la pastera Botnia y las papeleras instaladas en territorio argentino. Es también represas hidroeléctricas, sequía e inundación y la necesidad de realizar obras pero fundamentalmente de conservar los bosques nativos que son los reguladores naturales del ciclo hídrológico.
“Somos agua desde siempre", recuerda el hidrogeólogo Ramón Vargas y por lo tanto "la crisis del agua es la crisis de la vida", sentencia. Desde esa relación indivisible entre los habitantes y el agua que constituye su territorio Vargas observa que más allá de las obras ingenieriles que se propongan, "sin cambio cultural no puede darse un cambio en la gestión del agua" y apela a fortalecer "la cultura democrática del agua".
Foto: Día Mundial del Agua-ONU. Autor: Guimel Zalgado/ZGD
Comentarios